Mi historia en el deporte empezó en el 2008 como corredora muy amateur. En el 2010 llegué al mundo del ciclismo gracias a un amigo y desde ahí no he soltado la bicicleta. Con el tiempo me fui volviendo más competitiva hasta llegar a competir en categoría Elite un par de veces.
En 2022, un poco cansada de los pelotones y las competencias amateur de ciclismo donde nos separan categorías de género, decidí probar el triatlón, quería un deporte que fuera más individual y así ver hasta dónde podía llegar. Después de tres 70.3 y un Ultraman, estoy completamente enamorada de este deporte y convencida que aquí es donde pertenezco y donde mejor me va como atleta.
Mi meta como atleta es mejorar mis tiempos, quiero encontrar el punto exacto en el que debo ejecutar cada una de las tres disciplinas del triatlón para así tener mejores resultados en cada competencia. Tengo muchas ganas de hacer un Ironman completo y si todo sale bien, será en septiembre de este año.
¿Qué me motiva? Realmente no soy mucho de apegarme a la motivación, porque esa puede cambiar de un día a otro, puedo tener muchas motivaciones diferentes a lo largo del año o incluso por temporadas, o hasta de repente no sentir ninguna motivación. A lo que me gusta apegarme es a la disciplina, me encanta tener una rutina, horarios, y no moverme de ahí, soy muy estricta conmigo misma y de verdad que nunca fallo a mis entrenamientos, me fascina entrenar por horas y horas así que para mí nunca es difícil... ¡soy ñoña jaja!
Qué amo de Liv? Realmente todo, me encantan los diseños, los colores, la tecnología en bicicletas y accesorios, pero definitivamente mi parte favorita es todo lo que hay detrás de su filosofía con las mujeres en el deporte, amo que piensen en nosotras, que nos tomen en cuenta, que diseñen para y por nosotras, nos hace sentir queridas y valoradas, y eso me da fuerza, compromiso y pasión.